En la vida contemporánea es normal que una madre se pregunte si optar por la lactancia materna o por el biberón, una vez ha nacido el recién nacido. La mujer con su emancipación, trabaja igual que el hombre, algo que cambia radicalmente la forma en la que acepta su rol como madre. No obstante, se ha demostrado que la lactancia materna tiene múltiples beneficios en los bebés. Uno de ellos es, sin duda alguna, la salud bucodental.
Los bebés nacen con una mandíbula de pequeño tamaño a diferencia del maxilar superior. La succión, ayuda a que ésta se desarrolle, avanzando su posición y manteniendo una relación más proporcionada respecto a la maxilar superior. Algunos estudios se han centrado en demostrar que la lactancia materna favorece a ejercitar los músculos de masticación, ayudando a que las malas mordeduras se vean reducidas a la mitad.
Apostar por la lactancia materna, es apostar por una posición y función lingual natural, algo que ayuda a que su dentadura se desarrolle de forma correcta y y que facilita el equilibrio dental.
Más beneficios de la lactancia materna sobre la salud bucodental, es que ésta ayuda a aumentar la resistencia del esmalte de los dientes gracias a sus características grasas, facilitando así que se absorba mejor flúor y calcio.
La lactancia materna, también disminuye la aparición de microorganismos en la cavidad bucal, además de mantener un PH adecuado, algo que disminuye la aparición de caries. La leche que se da en biberón, puede tener más azúcares, y por tanto, afectar a la salud bucodental del pequeño.
Gracias a la lactancia, el niño contará con una estabilidad psicológica que evitará patrones perjudiciales en sus hábitos bucales, algo que puede generar deformación en la dentadura y problemas en la propia función bucofacial.
Pero los beneficios de la lactancia materna sobre la salud bucodental no acaban aquí. Mediante la lactancia materna, el bebé recibe una serie de elementos que ayudan a desarrollar un sistema inmunológico que evitará alergias y infecciones de carácter respiratorio, problemas que suelen comportar anomalías dentofaciales.
Si quieres que tu bebé cuente con una buena salud bucodental, opta por la lactancia materna, al cabo de los años su dentadura te lo agradecerá.